3 años después.

martes, 11 de marzo de 2008

Ahora pareciera que fue hace mucho tiempo. La voz entrecortada, las lágrimas, la pérdida de sueño, de apetito, pensamientos profundos, poca atención al cuidado personal, alcohol, cigarro en exceso, mala salud.
Pareciera que tiene muchos años, sin embargo sólo han sido tres años. Después de voltear a ver el camino recorrido, las piedras que intervenían en el andar y las lecciones aprendidas durante las largas noches de insomnio me doy cuenta que todo ha dado frutos. Ciertamente nos deben pasar cosas que nos hagan abrir los ojos para así poder superar lo que la vida nos tiene preparado. Es simpático ver el pasado y recibir los recuerdos con una sonrisa. Saber que todo el dolor ya se ha ido y sobretodo el rencor. Ese sentimiento que nos idiotiza el alma y nos infecta con sensaciones desagradables, sensaciones que sólo nos hiere la mente, la vida.
Hoy sucedió algo que salió de la nada. Sin pensarlo supe que tenía que hacerlo, algo me dijo que era necesario. Y sí, como por arte de magia me siento muy bien conmigo mismo y sobretodo con la persona, que tanto significó en mi vida. ¿Qué le haces a todo lo que puedes almacenar durante tu vida dentro de tu corazón? 3 años después lo supe: Guárdalo, atrápalo en tu memoria, en tu corazón, no dejes que se escurre y compartelo con delicadeza, con prudencia. Pero sobre todas las cosas, no olvides que lo viviste con alguien (una o más personas) y que esa persona es y será importante el resto de tus días. Ahora, no es más que un día en el que dos viejos conocidos se encontraron y se dijeron cosas agradables, pero más importante, regresaron el voto de confianza el uno al otro, incondicional y para toda la vida.

0 comentarios: